• https://youtu.be/r4sLNfcm6tE

Sobre el hielo estaba aquel día sin saber cómo ni porque...solo quería salir de aquel lugar, tenia miedo. Me daba pánico morír allí sola de hambre o de frio. Me hice un iglú. Cuando lo termine, desperté, era todo un sueño.

En la cama estaba dormidormida,  cuando de repente sonó el despertador...me asusté y me levanté  de un salto, me vestí...estaba la ropa fría, había 4°, me lavé la cara...miré el reloj, no me podían dar una noticia mejor aquel día... Era domingo, volví a la cama y me acosté  de nuevo, pero sin alarma.

Y entonces vi una luz, una luz tan bonita que no podía parar de mirarla, brillante y luminosa, que parecía como si me hablara y me dijera que fuera hacia ella... Los pies simulaban que se separaban del suelo poco a poco, como si se me dejaran dormir...y cuando vi la luz tan cerca que me escandinava, le dije a la esteticien que alejará el flexo, porque me estaba molestano la vista.

En ese pasillo frío, se escuchaba lejanamente llover, los árboles alborotados, el crujido del columpio que se movía con el viento, el perro que guardaba la casa, ladraba sin desconsuelo, y ella se preguntaba que estaba pasando...Cuando de repente, con toda precaución, abrió la puerta y descubrió que el marido había dejado el aire acondicionado puesto.

Sobre la estantería estaba la vieja foto de aquel viaje, aquel viaje de aquel lugar del que me enamoré. Cuando veo la foto me paro en seco, la miro fijamente y es como si todo alrededor desapareciera, todo se vuelve silencio, y la foto cobrará vida, es como si estuviera allí, viviendo ese mismo momento, la foto se convierte en movimiento, y escucho el mar de fondo, pájaros tropicales piando, el choque de las hojas de las palmeras, algún que otro coco callendo se al suelo...pero todo es recuerdo que nunca olvidaré; volveré.